El esquivo Gamusino
La infancia es una maravillosa etapa de juegos constantes, efervescencia y de increíble imaginación, que permite a los peques, que en ocasiones crucen voluntariamente o no el umbral de la fantasía. Durante generaciones los niños han sido engañados de forma continúa con los mismos juegos o proclamas, formas con los que conferimos a nuestra generación de yogurines pequeñas novatadas con diferente finalidad u objetivo. Sin duda, uno de las inocentadas que con más frecuencia se utiliza, especialmente en algunas regiones de la geografía española, entre ellas en Extremadura, es ir a la búsqueda del mítico gamusino.
El gamusino es un animal muy esquivo de hábitos nocturnos y que según la zona geográfica adquiere la forma de ave, pequeño mamífero o duende. El gamusino puede ser un animal poco simpático, en ocasiones, ya que puede posarse sobre las ramas de los árboles y orinar a los valientes que intentan buscarlo y darle caza, un autentico espíritu rebelde.

Normalmente, la búsqueda del Gamusino se suele proponer en campamentos de verano, en paseos nocturnos por senderos y caminos que transcurren por bosques o zonas pobladas de árboles, e incluso, en cualquier noche de verano, en la que los más mayores quieren gastarle una broma a los más pequeños.
Dependiendo de si la broma es para uno o varios niños, la organización del juego, suele variar, por ejemplo, si hay varios niños, se suelen dividir según su edad y se les lleva en grupo a la caza del Gamusino. Cuando se trata de un sólo niño, normalmente el niño es acompañado por los padres o familiares a la aventura del Gamusino.
Es muy habitual, especialmente en los pueblos que siguen manteniendo esta tradición, que los más pequeños, de tanto oír la palabra Gamusino y las historias de su búsqueda y caza, terminen por rogar a los mayores que los llevasen a ese intrigante cacería.
Se suele contar a los pequeños que se han instalado trampas para Gamusinos, en la zona en la que viven estos pequeños y escurridizos animales. Una vez, que se consigue despertar la curiosidad y el ansia de aventuras de los niños, ya está todo preparado para una aventura nocturna muy divertida y llega de emoción e imaginación.
Llegado el momento de salir a cazar Gamusinos, nos aprovisionamos de linternas, sacos y cuerdas para cerrar la bolsa fuertemente una vez haya sido atrapado. A partir de este momento, dependiendo de la población, de los adultos que hayan ideado la broma o de las características de los niños que van de caza, los siguientes pasos del juego, se suele realizar de muy distintas formas:
- En ocasiones, simplemente, se adentran en algún lugar poblado de árboles a la espera de avistar algún Gamusino y poder darle caza.
- En otras, ya hay un saco preparado como si estuviera lleno de Gamusinos en alguna de las trampas que se han preparado anteriormente a la salida con los niños. Una vez descubierta la bolsa llena de Gamusinos por uno de los adultos, cuando los niños vayan acercándose para observar y descubrir lo que hay dentro de la bolsa o saco, el adulto, simula que se le escapan y pide a los niños que los capturen, con lo que suelen lograrse que los pequeños corran por todas partes, con la intención de no dejar escapar a ninguna de estas pequeñas y misteriosas criaturas, lo que suele ser muy divertidos, especialmente para los espectadores.
Evidentemente no capturan ninguno, pero siempre habrá niños que asegurarán haberlos visto, haber estado a punto de atrapar a uno, y un montón de comentarios más, de una imaginación brillante.
Lo curioso de los Gamusinos es que cuando los pequeños descubren la autentica realidad del mismo, uno deja de ver el bosque y los lugares que ellos consideran especiales, como mundos mágicos.
Para mantener esta tradición y esta leyenda viva en Mystery House, hemos creado una sala especialmente dedicada a este mítico ser, con una historia y trama que hará las delicias de los más pequeños de la casa, sin tener que salir al bosque o campo para disfrutar del Misterio del Último Gamusino
Una aventura apta para todos los públicos, divertida y que gustará tanto a mayores como a pequeños en Mystery House